Cuadrado o redondo, comprenda el Yin y el Yang, para elegir mejor.

Entendiendo el Yin y el Yang

Todo el mundo ya ha oído hablar del Yin y el Yang, pero aún necesitas saber qué son. Todos tenemos presente estos dos tipos de comas, una blanca con un punto negro y otra negra con un punto blanco, que encajan entre sí formando una sola.

Si encontramos un punto blanco en la parte negra o un punto negro en la parte blanca, no es ninguna coincidencia. Más bien, pretende mostrar que cada elemento masculino tiene una parte femenina y cada elemento femenino tiene una parte masculina.

El Yin y el Yang están en todas partes a nuestro alrededor y están presentes en cada una de nuestras acciones, el Yin complementa al Yang y viceversa. Los términos Yin y Yang fueron creados por los antiguos chinos para describir la bipolaridad que podían ver al observar la naturaleza.

Así que no podemos imaginar el Yin sin el Yang y, por supuesto, tampoco podemos imaginar el Yang sin el Yin. Te daré un ejemplo que muestra lo que intento decirte. Si te hablo de la noche, pensaremos en el día. De hecho, ¿cómo podemos imaginar la noche sin el día? La noche (Yin) completa el día (Yang).

Como el sol está en el cielo, el cielo es Yang y por lo tanto, en contraste, la tierra es Yin. Antiguamente se pensaba que el cielo era redondo y la tierra plana. Por eso podemos decir que lo redondo es Yang y lo cuadrado es Yin.

Yin cuadrado femenino
es él quien recibe la vida. Yin es oscuro, frío. Es la energía de la pasividad fértil, da vida, por eso se dice que es el símbolo de la feminidad, del arraigo, de la maternidad y de las relaciones amorosas y amistosas.

El Yang masculino redondo
Es lo opuesto al Yin y es él quien lo completa.
Yang representa luminoso, que es duro y rápido. Está activo y manifiesta toda la energía acumulada. Yang está siempre en acción, en movimiento. Yang es masculino y es la chispa de la vida. Es la estructura, la base, el poder para actuar.